La artesanía tiene tirón en Colunga

La Nueva España (27.07.2019)

por Cristina Corte

 

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Descripción

Los participantes en el XV Mercáu «Nos Alcuentros» confirman un auge en la demanda de los artículos hechos a mano

Los comerciantes que desde ayer participan en el XV Mercáu tradicional «Nos Alcuentros» de Colunga lo confirman: la artesanía tiene mucho tirón en la actualidad. El motivo: frente a la industrialización y la producción en masa, el consumidor cada vez busca más la exclusividad que sólo el trabajo hecho a mano puede ofrecer. En total, son cerca de una treintena los puestos de artesanía y agroalimentación que hasta mañana ofrecen su género en el parque Hernán Pérez-Cubillas y que confían en hacer buena caja.

Entre ellos, Pilar Fernández, que llegó desde Llanes cargada con unas cuantas boroñas preñadas hechas en el fornu de un familiar. «Vine el año pasado y decidí repetir este porque se vende bien, el producto tiene aceptación», cuenta. Cada boroña pesa entre seis y ocho kilos, por eso lo normal es venderla por trozos de medio kilo. «A la gente le gusta porque está hecha con chorizos de casa y otros ingredientes cien por ciento asturianos», matiza. De que su producción está para chuparse los dedos dan cuenta clientes como el alemán Michael Twardo, que hasta quiso inmortalizar el momento en el que daba cuenta del botín con la cámara de su móvil. «La gastronomía de esta zona me encanta. Espero poder repetir otros años», dijo el joven, afincado en Berlín.

Chorizos, rosquillas, pan y empanadas fueron otros de los artículos más codiciados ayer en Colunga. Y aunque la mayoría de productos eran de la región, también hubo vendedores como Luis Cabeza que ofertaron quesos elaborados en la falda leonesa de los Picos de Europa. Con la particularidad de que Cabeza mezcla la leche pasteurizada con manzana asturiana o frambuesas de una plantación de Villaviciosa para dar un toque original a sus creaciones.

En la sección de artesanías, el toque internacional lo pusieron los argentinos Mónica Stocco y Gustavo Failde, que llevan más de una década asentados en el país, donde dan forma a lámparas de cera aromáticas que no se derriten. «Decidimos venir porque las expectativas de venta son buenas y la organización, inmejorable», resumieron. Aunque, sin duda, uno de los puestos que más expectación levantó fue el de complementos de Macu Pacios, que precisamente instaló su taller artesano en Colunga hace un lustro, cuando llegó a Asturias huyendo del bullicio y el estrés de la capital. Sus bolsos tienen la particularidad de estar diseñados de tal forma que reparten el peso y éste no se concentra en un único punto de apoyo. Además, los últimos diseños son en realidad cuadros firmados por el artista Juan Manuel Castilla. «Si te cansas de él, se puede descoser y colgar en la pared como si fuera un lienzo», indica la mujer, que reconoce que emprender en la zona rural no es sencillo. «Tienes que encargarte de todo: desde el diseño, la elaboración, la venta en mercados y la publicidad en redes sociales. Hay mucho trabajo detrás, pero merece la pena y, al final, el boca a boca funciona», sostiene Palacios, fundadora de la marca Partistayo.

El Mercáu «Nos Alcuentros» cuenta con una exhibición de las rederas de Lastres; hoy, a las 19.30 horas, habrá, además, una actuación de «Bailadera Títeres», y mañana, a las 18.00 horas, un desfile del grupo de baile «L’Aquedar».

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